lunes, 1 de febrero de 2016

2011

[Escribo como si de teclas de piano se tratase...
Rítmico y veloz.
Lento y suave,  casi aterciopelados los golpes,
a compás con la canción que me ayuda a componer.

Si recuerdo una sensación mientras escucho
solo veo tu cara, tu sonrisa y quizás 
la mirada con la que me descomponías 
un poco cada día.

Puede que sea incapaz de caminar. 
Puede que me haya hundido en el recuerdo y ahí quiera quedarme.

Puedo reparar la cama donde nos quedábamos.
Quizás retornar al perfume...
Parecer una lunática buscando las piezas que formaban un mundo
para sentirme en él.

La lunática más cuerda que se ha visto
viviendo tras un recuerdo, un sentimiento 
que me mantenía más viva que el aire.

Aunque ya no exista tal ser, aunque ya ni el olor de mi piel sea el mismo...
Vivir bajo un recuerdo. 
Imposibilidad de futuro ante una sensación tan eterna.
Enamorada de aquello que ya no existe.
Dueña de la melancolía que rodea estas paredes.
Pidiendo con la mirada y gritando sin hablar,
un auxilio mudo que brota al compás de ciertas canciones exorcizadas.]








No hay comentarios:

Publicar un comentario